El gobierno australiano incrementa su apuesta por la transición energética con una histórica licitación que busca acelerar su meta de energías renovables para 2030.
Australia está intensificando sus esfuerzos hacia la transición energética con la próxima subasta de energías renovables, que ahora se ha ampliado de 6 a 10 gigavatios. Esta subasta, la mayor en la historia del país, incluirá proyectos de energía eólica, solar y almacenamiento en baterías. Se estima que la licitación permitirá a Australia avanzar significativamente en su objetivo de alcanzar un 82% de generación de energía a partir de fuentes renovables para 2030. Este es un paso fundamental dentro de su Plan de Inversión en Capacidad (CIS), que busca desplegar un total de 23 GW en energías renovables y 9 GW en almacenamiento durante los próximos cuatro años.
La ampliación de esta licitación refuerza los compromisos climáticos del país y, al mismo tiempo, responde a la necesidad de reemplazar su envejecida flota de plantas de carbón, especialmente en Nueva Gales del Sur, que será una de las principales beneficiarias de la subasta. Se espera que más de 2,2 GW de los proyectos adjudicados se instalen en este estado, mientras que otras regiones como Australia del Sur también recibirán inversiones significativas.
Además, el gobierno planea extender el esquema a futuras subastas, asegurando así una capacidad constante de generación renovable en todo el país. Se estima que esta expansión podría reducir significativamente los costos de electricidad para los consumidores y contribuir a la fiabilidad energética. La subasta también promete impulsar la competitividad de Australia en el ámbito de las energías limpias, reforzando su papel en la lucha contra el cambio climático.