El almacenamiento energético se ha consolidado como un pilar esencial en la transición hacia un modelo energético sostenible y autónomo. En la feria Intersolar Europe 2025, celebrada en Múnich, se destacó el papel central de las baterías, tanto en sistemas independientes como híbridos, como solución para integrar energías renovables, mejorar la seguridad del suministro y reducir la dependencia de fuentes externas. La bajada de precios de las baterías, el aumento de la rentabilidad por los spreads horarios y los próximos pagos por capacidad en España están impulsando la viabilidad de estos sistemas. Además, los ingresos por servicios de ajuste consolidan su atractivo económico. La combinación de energía solar y almacenamiento se perfila como la fórmula ganadora para el futuro energético. AleaSoft Energy Forecasting, a través de AleaStorage, proporciona análisis y soluciones para optimizar el rendimiento y la rentabilidad de estos proyectos. La empresa destaca que el quinquenio 2025-2029 será clave para el despegue del almacenamiento. Este avance marca un hito decisivo hacia la descarbonización y la independencia energética.
Intersolar Europe 2025: el almacenamiento energético como protagonista
Durante los días 6 y 7 de mayo de 2025, se celebró en Múnich la edición anual de Intersolar Europe, el evento de referencia mundial en energía solar fotovoltaica. En esta ocasión, el almacenamiento energético, especialmente a través de baterías, emergió como el eje central del debate. Las soluciones de almacenamiento, tanto en sistemas independientes como en combinación con instalaciones solares, se consolidaron como elementos esenciales para la integración masiva de energías renovables, garantizando la estabilidad del suministro y avanzando hacia la independencia energética.
Factores clave en la consolidación del almacenamiento energético
La creciente importancia del almacenamiento se debe a varios factores. Uno de los más destacados es la significativa reducción en los costos de las baterías, que ha hecho económicamente viables proyectos anteriormente inviables. Además, el aumento de la volatilidad en los precios de la electricidad ha abierto oportunidades para modelos de negocio basados en el arbitraje de precios, comprando energía en momentos de bajos precios y vendiéndola cuando estos son altos. En España, se anticipa la implementación de pagos por capacidad en 2025, lo que proporcionará una fuente adicional de ingresos para proyectos de almacenamiento. Asimismo, la participación en servicios de ajuste está ganando relevancia, ofreciendo nuevas oportunidades de ingresos para las baterías gracias a su capacidad de respuesta rápida y flexibilidad.
La hibridación: combinación de energía solar y almacenamiento
La integración de sistemas de almacenamiento con plantas solares fotovoltaicas, conocida como hibridación, se perfila como una solución eficiente y competitiva. Esta combinación permite una mayor eficiencia en el uso de la infraestructura y la conexión a la red, además de ofrecer un coste de inversión cada vez más atractivo. El almacenamiento no solo es esencial para aprovechar toda la energía renovable generada, sino que también es una herramienta estratégica para lograr independencia energética, mejorar la seguridad del sistema eléctrico y avanzar hacia un modelo sostenible y económicamente viable.
Perspectivas y desafíos en España
En España, el almacenamiento energético ha cobrado especial relevancia tras el apagón masivo ocurrido en mayo de 2025, que expuso las deficiencias en la capacidad de almacenamiento del sistema eléctrico nacional. A pesar de contar con el mayor parque solar fotovoltaico de Europa, España representa solo un 4% del almacenamiento con baterías en el continente. Este evento ha resaltado la urgencia de desarrollar infraestructuras de baterías para asegurar el suministro y evitar futuras interrupciones. El Gobierno trabaja en medidas como subastas y ayudas públicas para fomentar el desarrollo del almacenamiento energético.
El almacenamiento energético ha dejado de ser una promesa de futuro para convertirse en un pilar estratégico del presente. Su papel es crucial para integrar energías renovables, garantizar la seguridad del suministro y avanzar hacia la independencia energética. La combinación de factores como la reducción de costos, la volatilidad de los precios de la electricidad y las nuevas oportunidades de ingresos hacen del almacenamiento una pieza clave en la transición hacia un sistema energético más sostenible y resiliente.