La falta de personal cualificado dificulta la expansión del sector energético sostenible, poniendo en riesgo los objetivos de descarbonización.
España ha superado el 50% de generación renovable en 2024, pero la falta de profesionales cualificados amenaza su transición energética. Según HAYS, el 85% de las empresas del sector energético tienen dificultades para encontrar talento, afectando áreas clave como la instalación de paneles solares y la energía eólica. Esta escasez frena proyectos en regiones como la Comunitat Valenciana, comprometiendo los objetivos del PNIEC. La rápida evolución tecnológica y la falta de formación especializada agravan el problema. Para revertir la situación, se requieren programas educativos adaptados, incentivos para atraer talento y colaboración entre empresas, gobierno y sector académico.
A pesar de que España ha superado el 50% de generación eléctrica renovable en 2024, el sector enfrenta un obstáculo significativo: la escasez de profesionales cualificados. Esta carencia amenaza con ralentizar el crecimiento de las energías limpias y pone en entredicho los ambiciosos objetivos de descarbonización del país.
Demanda creciente y oferta limitada
Según la Guía del Mercado Laboral 2024 de HAYS, el 85% de las empresas del sector energético en España reportan dificultades para encontrar perfiles adecuados. Esta situación se agrava en áreas técnicas esenciales para la construcción y mantenimiento de infraestructuras renovables, como instaladores de paneles solares y técnicos en energía eólica. La Asociación Valenciana de Empresas del Sector de la Energía (Avaesen) ha señalado que la falta de personal está impidiendo el avance de 450 proyectos de energías renovables en la Comunitat Valenciana, dejando la región en una situación similar a la de hace seis años.
Factores que contribuyen a la escasez
Varios factores contribuyen a esta problemática. La rápida evolución tecnológica en el sector exige una constante actualización de competencias, mientras que la formación especializada no ha crecido al mismo ritmo que la demanda. Además, la competencia con otros sectores industriales por talento cualificado intensifica la dificultad para atraer y retener profesionales en energías renovables.
Impacto en los objetivos de descarbonización
La falta de personal especializado no solo afecta la operatividad diaria de las empresas, sino que también pone en riesgo los objetivos nacionales de descarbonización. El Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC) establece metas ambiciosas para la reducción de emisiones y la transición hacia fuentes de energía limpias. Sin embargo, sin una fuerza laboral adecuada, la implementación de proyectos clave podría retrasarse, comprometiendo los compromisos ambientales de España.
Iniciativas para revertir la tendencia
Para abordar esta crisis de talento, es esencial una colaboración estrecha entre el sector educativo, las empresas y las instituciones gubernamentales. Programas de formación profesional adaptados a las necesidades actuales, incentivos para atraer a jóvenes a carreras técnicas y campañas de concienciación sobre las oportunidades en el sector energético son algunas de las medidas propuestas para mitigar la escasez de profesionales cualificados.