Noruega ha lanzado el proyecto Wind Catching Demonstrator, una innovadora muralla flotante de turbinas eólicas de 300 metros de altura y 350 metros de ancho, ubicada en las aguas de Øygarden. Este sistema contará con 40 turbinas de 1 MW, alcanzando una capacidad total de 40 MW y una producción anual estimada de 99 GWh.
A diferencia de los aerogeneradores tradicionales, esta estructura modular optimiza la captura del viento, reduce los costos de mantenimiento y permite una instalación en aguas profundas, donde los vientos son más fuertes y constantes.
El proyecto ha recibido una financiación de 1.200 millones de coronas noruegas (aproximadamente 102 millones de euros) por parte del gobierno, reforzando el liderazgo de Noruega en energías renovables. Su éxito podría impulsar la expansión de la energía eólica flotante a nivel mundial, posicionándola como una alternativa eficiente y sostenible.
En el marco de la transición hacia fuentes de energía más sostenibles, Noruega ha dado un paso significativo al desarrollar el proyecto “Wind Catching Demonstrator”. Este innovador sistema, impulsado por la empresa Wind Catching Systems, consiste en la construcción de la primera “muralla de turbinas” flotante en el mundo. Ubicada al noroeste de Bergen, en las aguas de Øygarden, esta estructura se erigirá sobre una plataforma flotante en el mar, marcando un hito en la energía eólica marina.
Características del proyecto
El “Wind Catching Demonstrator” contará con una altura de 300 metros y una anchura de 350 metros. Incorporará 40 turbinas de 1 MW cada una, sumando una capacidad total instalada de 40 MW y una producción anual estimada de 99 GWh. Se espera que el proyecto esté operativo en 2029, demostrando una alternativa revolucionaria a los sistemas tradicionales de turbinas eólicas marinas, que suelen basarse en aerogeneradores individuales de gran tamaño.
Ventajas de la energía eólica flotante
La energía eólica marina flotante ofrece múltiples beneficios. Al ubicarse en alta mar, donde las velocidades del viento son mayores y más constantes debido a la ausencia de barreras, se maximiza la eficiencia en la generación de electricidad. Además, las estructuras flotantes permiten una instalación en aguas más profundas, ampliando las áreas potenciales para la generación de energía eólica.
Reducción de costos y mantenimiento eficiente
Una de las ventajas destacadas de la muralla de múltiples rotores es la reducción significativa en los costos de mantenimiento. La configuración modular del sistema permite distribuir la producción de energía en varias unidades más pequeñas, facilitando reparaciones y mantenimientos sin interrumpir el funcionamiento general del parque eólico. Según expertos, esta tecnología tiene el potencial de optimizar la captura del viento y mejorar la eficiencia del sistema, especialmente en áreas marinas con vientos fuertes y constantes.
Apoyo gubernamental y proyección futura
El proyecto ha recibido un respaldo financiero significativo, con una subvención de 1.200 millones de coronas noruegas (aproximadamente 102 millones de euros) por parte de Enova, una entidad gubernamental que apoya iniciativas de energía limpia. Este apoyo subraya el compromiso de Noruega con la innovación en energías renovables y su liderazgo en la adopción de tecnologías sostenibles. Si el proyecto tiene éxito, podría impulsar la expansión de la energía eólica flotante a nivel mundial, ofreciendo soluciones sostenibles para el abastecimiento energético en diversas regiones.
Comparación con iniciativas internacionales
Mientras China ha desarrollado megaturbinas eólicas de gran altura, Noruega apuesta por una solución innovadora con sus murallas de turbinas flotantes. Esta estrategia no solo destaca por su enfoque tecnológico, sino también por su potencial para reducir la dependencia de recursos no renovables y facilitar la transición hacia un modelo energético más sostenible.
Con proyectos como el “Wind Catching Demonstrator”, Noruega reafirma su posición a la vanguardia de la innovación en energías renovables, ofreciendo modelos que podrían ser replicados en todo el mundo para enfrentar los desafíos energéticos y ambientales actuales.