El rápido avance de China en la adopción de vehículos eléctricos (VE) y la expansión de su red de trenes de alta velocidad están transformando el mercado energético global. Según la AIE y BloombergNEF, los VE ya desplazan 1,8 millones de barriles de petróleo diarios a nivel mundial, de los cuales China contribuye con más de la mitad.
Más del 50% de las ventas de autos nuevos en el país son eléctricos o híbridos enchufables, con 25 millones de vehículos de nueva energía en circulación. A esto se suma la extensa red ferroviaria eléctrica china, que reduce la demanda de combustibles de aviación al favorecer el transporte terrestre eficiente.
Este cambio estructural plantea desafíos para la industria petrolera, que enfrenta una desaceleración en la demanda china, afectando los márgenes y la rentabilidad de las empresas del sector. China se consolida como un actor clave en la transición hacia un futuro energético más sostenible.
El acelerado avance de China en la adopción de vehículos eléctricos (VE) y la expansión de su red de trenes de alta velocidad está generando una disminución significativa en la demanda mundial de petróleo. Según datos recientes de la Agencia Internacional de Energía (AIE) y BloombergNEF, los VE están desplazando aproximadamente 1,8 millones de barriles de petróleo por día a nivel global, una cantidad comparable al consumo diario de México. China es responsable de más de la mitad de esta reducción, disminuyendo el consumo global de petróleo en más de un 1%.
Adopción masiva de vehículos eléctricos en China
En los últimos meses, más del 50% de las ventas de vehículos nuevos en China correspondieron a modelos totalmente eléctricos e híbridos enchufables, marcando un hito significativo en la industria automotriz. Actualmente, hay más de 25 millones de vehículos de nueva energía en las carreteras del país, representando alrededor del 7% del parque vehicular total. Esta tendencia está transformando los patrones de movilidad y las preferencias de los consumidores, contribuyendo a la disminución del uso de petróleo en el transporte por carretera.
Expansión de la red de trenes de alta velocidad y su impacto en el transporte aéreo
La red nacional de trenes de alta velocidad de China, una de las más extensas y avanzadas del mundo, está limitando el crecimiento del transporte aéreo interno. La eficiencia y sostenibilidad de los trenes eléctricos han llevado a una preferencia por este medio de transporte, reduciendo la demanda de petróleo para combustibles de aviación.
Perspectivas futuras y desafíos para la industria petrolera
La creciente adopción de vehículos impulsados por combustibles alternativos y la expansión de la infraestructura ferroviaria eléctrica en China están redefiniendo el panorama energético global. Se prevé que la demanda china de crudo crezca solo 180.000 barriles por día este año, ya que la desaceleración económica y el cambio hacia fuentes de energía alternativas reducen el consumo de petróleo.
Este cambio estructural presenta desafíos para los productores de petróleo y los inversores que han dependido históricamente del crecimiento de la demanda china. La disminución en la demanda de combustibles tradicionales podría afectar los márgenes de refinación y la rentabilidad de las empresas del sector.
China está desempeñando un papel crucial en la transición hacia energías más limpias, con políticas que fomentan la adopción de vehículos eléctricos y la expansión de su red de trenes de alta velocidad. Estas iniciativas no solo están reduciendo la demanda interna de petróleo, sino que también están influyendo en el mercado energético global, acelerando la transición hacia un futuro más sostenible.