El sistema eléctrico de España sufrió este lunes el mayor apagón de su historia reciente, tras una caída súbita del 57% en la generación eléctrica, aparentemente causada por problemas técnicos vinculados a la energía solar, aunque aún se investiga el origen. La desconexión automática de muchas instalaciones renovables, debido a fallos de tensión, agravó el colapso, dejando sin luz a la península ibérica. Red Eléctrica descartó un ciberataque y activó un proceso de reinicio gradual apoyado en fuentes estables como la hidráulica y los ciclos combinados de gas. El restablecimiento total se logró casi 20 horas después, a las 9:00 del martes, cubriendo el 99,95% de la demanda eléctrica.
CAUSAS PRELIMINARES: FALLO DE ESTABILIDAD Y PROTECCIÓN EN RENOVABLES
Aunque aún no se han determinado las causas definitivas, los primeros análisis apuntan a una confluencia de eventos técnicos posiblemente vinculados a la generación solar fotovoltaica, que en ese momento estaba cubriendo casi el 55% de la demanda. La desconexión se produjo por los llamados sistemas de protección frente a huecos de tensión, mecanismos de seguridad que desconectan automáticamente las plantas cuando detectan perturbaciones en la red, para evitar daños.
Además, otras tecnologías renovables como la eólica también redujeron su producción drásticamente. Por ejemplo, la fotovoltaica cayó de 17.657 MW a 7.844 MW en solo cinco minutos; la eólica se redujo un 39%, y la producción hidroeléctrica y nuclear también descendió significativamente, llegando esta última a cero.
CARACTERÍSTICAS DE LAS ENERGÍAS RENOVABLES Y SU IMAPCTO EN LA ESTABILIDAD
Según los expertos, las energías renovables no síncronas como la solar y la eólica carecen de inercia rotacional, una propiedad que ayuda a estabilizar la red en caso de perturbaciones. Mientras que las máquinas rotativas (como turbinas hidráulicas o térmicas) giran sincronizadas a la frecuencia de red (50 Hz en Europa), las instalaciones solares no tienen esta capacidad de respuesta instantánea. Esto provoca que, ante caídas de frecuencia o tensión, no contribuyan a mantener la estabilidad del sistema, y en su lugar se desconecten.
Red Eléctrica de España (REE) ha descartado intrusiones externas o ciberataques, y apunta a dos incidentes secuenciales registrados en el suroeste peninsular como los posibles desencadenantes del colapso. El primero fue superado con éxito, pero el segundo, apenas segundo y medio después, resultó en una pérdida de generación masiva que activó mecanismos de desconexión automática.
REINICIO DEL SISTEMA: PRIORIDAD A FUENTES GESTIONABLES
Ante el apagón, se activó un protocolo de recuperación escalonado, utilizando inicialmente energía hidroeléctrica, por su capacidad de respuesta rápida e independencia de otros sistemas. Posteriormente se sumaron los ciclos combinados de gas, por su flexibilidad y rapidez de arranque. También se recurrió a las interconexiones internacionales con Francia y Marruecos para importar electricidad y estabilizar la frecuencia de la red.
El restablecimiento se realizó de forma progresiva, por zonas, siguiendo estrictos protocolos técnicos para evitar sobrecargas en la red de distribución.
RECUPERACIÓN COMPLETA EN MENOS DE 24 HORAS
A pesar de la magnitud del apagón, los expertos destacan la rapidez y eficiencia del restablecimiento. A las 20:15 ya se cubría más del 40% de la demanda, y a medianoche, el 85%. La normalización total del sistema se alcanzó a las 9:00 del martes, con una cobertura del 99,95% de la demanda prevista.
Este evento ha puesto de relieve la necesidad de adaptar los sistemas eléctricos a un entorno de generación renovable masiva, que si bien es más sostenible, presenta nuevos desafíos técnicos en términos de estabilidad, inercia y respuesta ante contingencias.
Fuente: RTVE.com