Europa apuesta por la energía solar marina con un innovador rompeolas flotante en Gijón
El proyecto europeo SUREWAVE, financiado por Horizon Europe, busca revolucionar la energía solar marina con la instalación de un sistema fotovoltaico flotante en El Musel, Gijón. Su innovación radica en un rompeolas flotante fabricado con materiales reciclados y sostenibles, diseñado para proteger los paneles solares de olas de hasta 14 metros y vientos superiores a 90 km/h. Este rompeolas, de hormigón ultraligero desarrollado por Acciona, actúa como barrera frente a las condiciones extremas del océano y permite que la estructura solar funcione eficientemente en mar abierto.
El Instituto de Investigación Marítima MARIN ha probado con éxito el sistema, validando la estabilidad de sus bisagras flexibles y su adaptabilidad al movimiento del agua. Con este avance, SUREWAVE aspira a ampliar la viabilidad de las granjas solares flotantes, apoyando la transición hacia energías renovables y sostenibles en el entorno marítimo.
Fuentes: PV Magazine, Solarinfo, Acciona
El innovador proyecto SUREWAVE busca revolucionar la energía solar en alta mar con una estructura flotante que puede resistir condiciones extremas de oleaje, viento y corrosión.
El proyecto SUREWAVE, financiado por la Unión Europea a través del programa Horizon Europe, se ha propuesto desarrollar una innovadora instalación fotovoltaica flotante capaz de operar en mar abierto bajo condiciones climáticas adversas. Este avance, que se instalará en el puerto de El Musel (Asturias), empleará una estructura de rompeolas que protegerá los paneles solares del impacto directo del oleaje, maximizando así su eficiencia energética y vida útil.
El rompeolas fotovoltaico flotante está diseñado para soportar olas de más de 14 metros de altura, vientos superiores a los 90 km/h y corrientes intensas, lo que lo hace una solución pionera en la transición hacia una energía renovable marina viable en el continente europeo. Este tipo de estructura, al estar flotando en lugar de estar fijada en el lecho marino, facilita su instalación en aguas profundas, donde la energía solar fotovoltaica podría aprovechar grandes extensiones para generar electricidad limpia. El proyecto reúne a organizaciones de España, Alemania, Noruega y los Países Bajos, siendo coordinado por SINTEF (Noruega) y con la participación de empresas líderes en sostenibilidad como Acciona y CEIT.
La tecnología de SUREWAVE, además de su innovación estructural, incluye el uso de materiales circulares que reducen el impacto ambiental del rompeolas y aumentan su resistencia a la corrosión y la presión del agua salada. Acciona ha desarrollado hormigones sostenibles específicos para esta estructura, integrando áridos reciclados de vidrio y materiales derivados de residuos de construcción, lo que permite reducir el uso de clinker en la fabricación de cemento, un componente de alto impacto en emisiones. El núcleo del rompeolas se compone de hormigón ultraligero, que además de ofrecer resistencia, permite que la estructura flote sobre la superficie del agua.
En cuanto a la estabilidad y el comportamiento hidrodinámico, el Instituto de Investigación Marítima de los Países Bajos (MARIN) ha llevado a cabo pruebas en tanques de olas para asegurar la efectividad del diseño en condiciones adversas. Durante estas pruebas, se ha evaluado el desempeño de las bisagras flexibles que interconectan los paneles solares flotantes, ya que estas permitirán que la estructura se adapte al movimiento del agua sin sufrir daños.
La instalación de este prototipo en el puerto de Gijón es un paso clave para evaluar su durabilidad frente a la corrosión y el crecimiento marino. Este avance podría significar una alternativa sostenible para zonas costeras de todo el mundo que enfrentan desafíos de energía y espacio. El objetivo de SUREWAVE es posicionar a Europa a la vanguardia de la energía solar fotovoltaica flotante y abrir nuevas oportunidades en el despliegue de energías renovables en ambientes marítimos extremos.
Con este desarrollo, el proyecto apunta a reducir la dependencia de fuentes fósiles y a avanzar hacia un futuro de energía limpia, resistente y adaptada a entornos desafiantes, contribuyendo así de manera significativa a la lucha contra el cambio climático y promoviendo la transición hacia una economía circular.